Fundadas para "hacer presente la Adoración de Dios", las Adoratrices del Corazón Real tienen como vocación apoyar a los sacerdotes del Instituto de Cristo Rey Sumo Sacerdote en sus apostolados a través de sus oraciones y trabajos.

Respondemos con gusto a las diversas peticiones de nuestros canónigos en todo el mundo; de vez en cuando, algunas hermanas son enviadas a los diversos apostolados para cantar la Santa Misa, acompañar una peregrinación, pasar tiempo con los niños, servir en los retiros...

 Con ocasión de las novenas preparatorias de grandes festividades (Inmaculada Concepción, Sagrado Corazón), visitamos los apostolados para cantar gregoriano (Oficios, Bendición del Santísimo Sacramento, Santa Misa) o polifonías; nos encontramos siempre con fieles a los que nos alegra dar a conocer nuestra vida de Adoratrices. Recibimos con gusto las intenciones de oración de algunos y las noticias sobre las intenciones de oración que nos han confiado otros. Conocemos a las personas con las que hemos intercambiado correspondencia...

También participamos con gran alegría en el servicio de los retiros organizados para los fieles, por nuestros canónigos, fuera de nuestras casas de huéspedes.

A los niños y jóvenes, con los que nos rodeamos durante los campamentos de verano o en las jornadas familiares, les ayudamos a descubrir un poco nuestra vida cotidiana (canto, bordado, cocina, catecismo, visitas a personas que están solas, ...).

La cuestión de la vida religiosa es cada vez menos tenida en cuenta por los jóvenes de hoy, por lo que las peregrinaciones son una oportunidad para mostrar su existencia y explicarla a quienes lo deseen.